La Semana Trágica. El Archivo Secreto del Vaticano

Ramón Corts i Blay

Publicaciones de la Abadía de Montserrat,

Barcelona, 2009

607 pág.

Con ocasión del centenario de la llamada Semana Trágica, semana del 26 de julio al 2 de agosto de 1909, se han recordado, en Cataluña los trágicos hechos sucedidos en Barcelona, con diversos actos que han aportado alguna luz más a la "inexplicable" barbarie de aquellos días. Los hechos podemos resumir los en pocas palabras, aunque la explicación de las causas requiera –por parte de los historiadores– unos estudios cada día más ajustados a la realidad. Fue a raíz del reclutamiento de reservistas catalanes –en su mayoría pertenecientes a la clase obrera– ordenada por el Gobierno de Madrid dirigido por Maura. Se trataba de enviarlos a Marruecos para sofocar unos incidentes armados, que ya habían causado bastantes muertos entre los primeros reservistas que fueron allá. Por ello hubo en la ciudad condal un estallido popular, un levantamiento o rebelión, liderado por una mezcla de fuerzas que iban desde anarquismos de diverso tipo, pasando por grupos lerrouxistas y marxistas y terminando en los ácratas, librepensadores y anticlericales, que también participaron ideológicamente. Unos grupos revoltosos convocaron una huelga-protesta, pero enseguida las iras se dirigieron –y ahí está la pregunta, el porqué, que muchos han tenido que hacerse– en contra de la Iglesia, vertiendo toda su furia en la quema de templos, conventos, colegios religiosos y casas dedicadas a obras asistenciales. También muchos se han preguntado cómo es que las fuerzas del orden público no pudieron –o quisieron– controlar la revuelta, y tuvo que ser el ejército quien puso fin a los trágicos hechos el día 2 de agosto, después de reducir a las masas enfurecidas. Hubo muertos y encarcelados, juicios que llevaron a algunos de los supuestos implicados –como Ferrer i Guardia– a la pena capital, a la cadena perpetua o al destierro.

Los hechos tuvieron un gran eco en toda España y en el extranjero. Al verse implicada pasivamente la Iglesia, las autoridades eclesiásticas fueron las primeras de valorar las causas y las consecuencias de los hechos e informaron diligentemente al Nuncio, Antonio Vico, y a la Santa Sede por medio de cartas e informes que llegaron al Secretario de Estado, Merry del Val, y al Santo Padre Pío X.

Y esta base histórica esencial –el Archivo Secreto del Vaticano–, desde la cual la obra del Dr. Ramón Corts se adentra y se centra, en cuanto a la Semana Trágica, será indispensable para completar aquellos hechos, sin dejar de lado las otras fuentes, otros estudios históricos y otras opiniones que se han utilizado hasta el día de hoy. El enfoque riguroso –diría incluso exhaustivo– del libro es claro: ver la Semana Trágica de la documentación extraída del Archivo Secreto del Vaticano; archivo que ya está abierto en cuanto a la documentación de épocas tan señaladas como las que son objeto de estudio por parte del Dr. Corts. Él mismo ha publicado, en varios volúmenes, todo aquello que hace referencia a nuestro país durante estas etapas de la historia (cf. la documentación de los siglos XIX y XX (1887-1921) sobre Cataluña y la Santa Sede conservada en el Archivo Secreto del Vaticano).

Y esta visión del autor –por la profusa documentación, aportada por los análisis realizados y por el profundo y meticuloso conocimiento histórico de la política y los asuntos eclesiásticos de aquellos tiempos– da toda la impresión de poderse mantener en un nivel de lo más obje-tivo y rozando la perfección. Su reflexión huye de todo tremendismo, de toda acusación gratuita, de todo tipo de subjetivismo, porque, como buen historiador, va a las mejores fuentes que ha podido encontrar todavía intactas y, por eso mismo, inéditas. Y aporta al mismo tiempo aspec-tos de la Semana Trágica que no habían sido nunca antes averiguados. Analiza los hechos ocurridos y sus causas desde los documentos eclesiales conservados en el Archivo Secreto del Vaticano; no pretende hacer otra cosa y es muy de agradecer, porque así completa muchos otros estudios anteriores que desconocían este fondo documental procedente de la Nunciatura Apostólica de Madrid y de la Secretaría de Estado del Vaticano.

La obra tiene dos partes. La primera comprende los análisis de toda la documentación y la segunda incluye todos los documentos inéditos del Archivo Secreto del Vaticano estudiados por el autor de la obra con el nombre de Apéndice documental. Al final, sigue con las fuentes –manuscritas e impresas–, una larga Bibliografía, un Índice onomástico y el Índice General.

Para hacerse una buena idea del contenido del estudio del Dr. Corts, hablaré, a grandes rasgos, de la primera parte antes de pasar a la segunda. Comienza, la primera, con una introducción y un estudio previo, realizado por el historiador Vicente Cárcel, el cual, de paso, toca el tema llamado "la cuestión catalana" en cuanto a las relaciones de la Iglesia y del Estado, que han repercutido a menudo en nuestro país, desde hace muchas décadas. A modo de prólogo, antes de entrar en la temática del libro, hay unas clarificadoras palabras del autor, que da razón del largo estudio que le ha ocupado muchas horas y días de un intenso trabajo.

– Primera parte

El primer capítulo comprende:

   1. Los hechos y

   2. La historiografía de la Semana Trágica.

El segundo, titulado 'La Semana Trágica vista por la Santa Sede', contiene:

   1. La visión general de los hechos a base de testimonios fehacientes.

   2. La actuación del Nuncio Antonio Vico.

   3. La reacción del Episcopado catalán y de los católicos de toda España y otras reacciones en el ámbito eclesial.

   4. Las protestas católicas contra la escuela laica en el contexto de aquella época.

El capítulo tercero, 'La Santa Sede y el fusilamiento de Ferrer Guardia', comprende:

   1. Iniciativas del Nuncio ante la agitación internacional.

   2. La Santa Sede y las grandes manifestaciones de octubre, Ferrer Guardia, etc.

   3. El Nuncio y la masonería.

   4. Iniciativa de Merry del Val para obtener el indulto de Ferrer Guardia.

El cuarto, titulado 'El Nuncio Vico continúa informando a la Santa Sede después del fusilamiento de Ferrer Guardia, incluye:

   1. El Nuncio y las consecuencias de la Semana Trágica.

   2. Un año después de la Semana Trágica.

   3. El viaje del Nuncio Vico a Barcelona.

   4. La revisión del proceso de Ferrer Guardia.

El capítulo quinto, 'El eco de la Semana Trágica se debilita, consiste en:

   1. Desaparece Canalejas.

   2. Desaparece el Nuncio Vico.

   3. Entendimiento de la Santa Sede con el Conde de Romanones.

En el capítulo sexto, 'Evaluación de la Documentación sobre la Semana Trágica conservada en el Archivo Secreto del Vaticano', el Dr. Corts valora:

   1. Hechos y reacciones.

   2. Repercusión internacional.

   3. Consecuencias.

   4. El eco de la Semana Trágica se debilita.

Por último, en el capítulo siete el autor extrae las conclusiones. Así termina la primera parte, muy estudiada, muy densa y muy distraída a la vez. Son casi trescientas páginas. 

– La segunda parte –capítulo octavo–.

El autor de esta obra de investigación la dedica a la documentación utilizada y la titula “Apéndice Documental”. Es de una gran riqueza, ya que hay todo tipo de documentos, aparte de otras fuentes manuscritas e impresas que también nos proporcionará antes de pasar a la Bibliografía. Entre la documentación secreta del Archivo del Vaticano encontramos 97 documentos con la correspondencia mutua entre el Nuncio Vico y el Secretario de Estado Vaticano, Merry del Val; cartas, despachos e informes de muchos obispos para el Nuncio y para la Santa Sede sobre los hechos de julio y agosto de 1909; informaciones y cartas de sacerdotes, religiosos y religiosas afectados; protestas diversas dirigidas a las autoridades; circulares de las logias masónicas extraídas de informaciones diversas; editoriales de la prensa, que también llegaron a la Santa Sede, etc. Es tan numeroso y tan rico, este Apéndice Documental, que él mismo da ya, de entrada, un gran valor investigador a todo el estudio. Son casi 300 páginas más.

Un estudio –como decía alguien hace unos meses– necesario, oportuno, riguroso, actualizado, original y respetuoso con toda la documentación, ya que no oculta ningún aspecto de aquellos trágicos hechos. El Dr. Corts profundiza en sus causas; explica también el desarrollo, históricamente anterior, de algunas medidas gubernativas y reacciones populares anticlericales (1835-1836) y otras posteriores (1931-1939), con hechos y consecuencias igualmente tan trágicos para nuestro país como los que ocurrieron en aquellos días del verano de 1909; reflexiona sobre los antecedentes, las tomas de posición y las reacciones posteriores a los hechos; especifica los edificios quemados durante la Semana; cuestiona la actitud de algunas autoridades civiles que no reaccionaron coherentemente ante la violencia desatada; presenta la autocrítica –quizá insuficiente– que hicieron o hubieran podido hacer las autoridades eclesiásticas con relación al anticlericalismo feroz de aquellos años; explica todas las cuestiones relacionadas con el encarcelamiento y la ejecución de Ferrer i Guardia, tratado entonces como el gran culpable de la tragedia, presenta positivamente la reacción cristiana del poeta Joan Maragall y el Padre jesuita Casanovas, ante los acontecimientos y lo que esperaban ellos de las autoridades; etc.

A pesar de la extensión, la obra se lee bastante rápidamente, porque nunca pierde interés. Vale la pena que los interesados en la historia la tengan muy en cuenta, porque la meta ha sido puesta en el lugar adecuado a raíz de los cien años del Trágico acontecimiento.

Josep Vall i Mundó