Radiografía de la libertad religiosa en el mundo
«Los derechos humanos deben incluir el derecho a la libertad religiosa, entendido como expresión de una dimensión que es al mismo tiempo individual y comunitaria, una visión que manifiesta la unidad de la persona, distinguiendo claramente entre la dimensión de ciudadano y la de creyente. La actividad de las Naciones Unidas en los años recientes ha asegurado que el debate público ofrezca espacio a puntos de vista inspirados en una visión religiosa en todas sus dimensiones, incluyendo la de rito, culto, educación, difusión de informaciones, así como la libertad 
de profesar o elegir una religión. 
Es inconcebible, por tanto, que los creyentes tengan que suprimir una parte de sí mismos –su fe– para ser ciudadanos activos. No debería ser necesario renegar de Dios para poder gozar de los propios derechos. Los derechos asociados con la religión necesitan protección, sobre todo si se los considera en conflicto con la ideología secular predominante o con posiciones de una mayoría religiosa de naturaleza exclusiva. No se puede limitar la plena garantía de la libertad religiosa al libre ejercicio del culto, sino que se debe tener en la debida consideración la dimensión pública de la religión y, por tanto, la posibilidad de que los creyentes contribuyan a la construcción del orden social». (Benedicto XVI, Discurso a la Asamblea General de las Naciones Unidas, el 18 de abril de 2008).
Con estas palabras, el Santo Padre extraía consecuencias del artículo 18 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que textualmente dice: «Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia».
El cuidado en defender este derecho fundamental es la primera manifestación de sensibilidad para hacerlo con los demás derechos humanos. De ahí el interés de tantos en hacer un seguimiento de la «salud» de este derecho a la libertad religiosa en el mundo. Para la confección de este y de otros artículos de este número de Temes d´Avui, hemos acudido a diversas fuentes de primer nivel centradas en el estudio sobre el terreno de la libertad de religión y de conciencia1. A continuación, echamos un vistazo, señalando los principales puntos del globo en los que esta libertad es maltratada.
Los ataques y restricciones a la libertad religiosa son muy diversos, así lo ponen de manifiesto los diversos informes consultados. La International Religious Freedom Report for 2011, del Departamento de Estado de EEUU, pone su acento en la persistencia de regímenes que mantienen políticas restrictivas de este derecho humano de muy diferentes maneras: desde la obligatoriedad de registros que favorecen los grupos religiosos con autorización estatal, las leyes contra la blasfemia, o el tratamiento de las minorías religiosas como amenazas a la seguridad. El Report del Departamento de Estado norteamericano presta atención a las grandes tendencias que se detectan en nuestro tiempo, como el impacto de las transiciones políticas y demográficas sobre las minorías religiosas. Entre estas minorías discriminadas, menciona: los bahais y los sufíes en Irán, los cristianos en Egipto, los ahmadis en Indonesia y Pakistán, los musulmanes en varios países de Europa; budistas tibetanos, cristianos y musulmanes iugures en China y judíos en muchas partes del mundo.
La Primavera árabe, vista por muchos en los países de la zona y del mundo occidental como una promesa de libertad y democracia, también ha provocado recelos y tensiones. En Egipto, se han multiplicado las acciones violentas contra los cristianos coptos. Hasta esta fecha, los funcionarios del gobierno y los responsables de las fuerzas de seguridad no han tenido que rendir cuentas por sus acciones u omisiones.
Otro aspecto que destaca el informe norteamericano es la creciente preocupación europea ante su diversidad cultural y religiosa, que ha llevado a aprobar leyes que prohíben algunas vestimentas musulmanas.
La religión como excusa para limitar las libertades
La manera de responder que adoptan algunos gobiernos ante lo que consideran «extremistas violentos» con frecuencia repercute en una restricción de la libertad religiosa, constata el Report 2011, 
que sentencia: «Las autoridades a menudo no distinguen entre la práctica religiosa y pacífica de actividades criminales o terroristas». Esto ha sucedido en países como Bahrein, Rusia, Irak y Nigeria.
Ampliación del uso y abuso de las leyes contra la blasfemia
«Algunos gobiernos utilizan cada vez más la blasfemia, la apostasía, y la difamación de la religión en leyes para restringir la libertad religiosa, restringir los derechos de las minorías religiosas, y limitar la libertad de expresión», es otra constatación del informe estadounidense. Pakistán es un ejemplo de este abuso, con violentas acciones como el asesinato del gobernador de Punjab Salman Taseer y también del Ministro de Asuntos de las Minorías Shahbaz Bhatti, el único cristiano en el gabinete. Aasia Bibi, cristiana, permanece en prisión, en espera de una 
apelación a la sentencia de muerte de 2010, la primera sentencia por blasfemia dictada contra una mujer. Otro caso es Arabia Saudí, donde la blasfemia en contra de la interpretación wahabita del Islam sunita se castiga con la muerte, aunque la pena más común sea una larga pena de prisión. «A mediados de noviembre de 2011,–relata el Report– Mansor Almaribe, un australiano de ascendencia chií iraquí, fue detenido y condenado por blasfemia e «insultos a los compañeros del Profeta». Fue condenado a 500 latigazos y un año de prisión. Su sentencia se redujo a 75 latigazos y no ir a la cárcel. Se le permitió regresar a Australia tras recibir los latigazos». En Indonesia, también se aplica la ley contra la blasfemia: por ejemplo, Antonius Richmond Bawengan, un cristiano, fue condenado el 8 de febrero a cinco años de prisión por blasfemia por la distribución de libros considerados «ofensivos contra el Islam». También en Indonesia, el gobierno no pudo o no quiso detener el asesinato de cinco Ahmadis, que tuvo lugar en Cikeusik, provincia de Banten, por una multitud de 1.500 personas. Las imágenes en vídeo del ataque publicadas en internet muestran el linchamiento de las víctimas ante la pasividad de los agentes de policía.
Creciente antisemitismo
El Informe documenta un gran número de manifestaciones antisemitas: desde la negación del Holocausto a la identificación de algunas políticas del estado de Israel con el antisemitismo, el recurso de ciertos grupos nacionalistas de utilizar tópicos antisemitas como las teorías conspiratorias, las profanaciones, el libelo de sangre y las caricaturas demonizando a los judíos.
Violadores crónicos de la libertad religiosa
Hay una serie de países que se mantienen como violadores crónicos y sistémicos de la libertad religiosa. Tanto el Report americano cono el Informe de AIN documentan el estado actual de la represión religiosa en Afganistán, China, Corea del Norte, Irán, Arabia Saudita, Eritrea y otros países con gobiernos autoritarios como Cuba, Pakistán, Rusia, Siria, Turkeminstan, Vietnam. Al igual que otras libertades, la libertad religiosa en Corea del Norte, simplemente no existe. En la presentación del Report 2011, la secretaria de Estado Hillary Clinton señaló los «países de especial preocupación»:
China: que fortalece su presión sobre el budismo tibetano y que, en protesta, provocó la autoinmolación de, 12 tibetanos, como mínimo, en 2011. Por la política de tolerar únicamente religiones en sus versiones «patrióticas» (budistas, taoístas, musulmanes, católicos y protestantes) para poder registrar y poder celebrar legalmente sus servicios religiosos. Denuncia las limitaciones a los budistas seguidores del Dalai Lama, a la Iglesia católica fiel a Roma o a los musulmanes que viven en la región autónoma Iugur de Xinjiang.
Eritrea: por el continuo hostigamiento de los miembros de los grupos religiosos no registrados. Para la intimidación gubernamental y el gran número de personas encarceladas por sus creencias religiosas, maltratadas, torturadas, algunas de las cuales han muerto. Hay noticias de personas liberadas tras abjurar de su fe.
Irán: La libertad religiosa en Irán se deterioró aún más a partir de una situación que ya era atroz. El gobierno utiliza el encarcelamiento, el hostigamiento, la intimidación y la discriminación basada en las creencias religiosas. En sus actuaciones pueden mezclarse motivaciones religiosas y políticas. Por ejemplo, una sentencia de 20 años de prisión contra 7 líderes Baha, posteriormente reducida a 10 años en 2010, volvió a la condena inicial por «espionaje a favor de Israel, insulto a la santidad de la religión y propaganda contra la República islámica». «El gobierno creó una atmósfera amenazante para casi todos los grupos religiosos no chiíes, sobre todo para los Baha, así como para los musulmanes sufíes, los cristianos evangélicos, judíos, suníes y zoroastrianos».
Tal como queda reflejado en los cuatro informes utilizados, son muchos los países que de una u otra forma no respetan la libertad religiosa. En este mapa sólo se indica:
♦ granate oscuro → Países que sistemáticamente violan la libertad religiosa.
♦ granate intermedio → Graves violaciones.
♦ granate suave → Paradoja: Agresión legislativa a la libertad religiosa y de conciencia en el contexto de una democracia que reconoce las libertades fundamentales.
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Corea del Norte: La libertad religiosa no existe en ninguna forma en Corea del Norte. El gobierno ha continuado reprimiendo los grupos religiosos no autorizados, y ha tratado con dureza aquellos ciudadanos que no participan en las actividades religiosas. «Debido a la inaccesibilidad del país y de la incapacidad de los extranjeros para obtener información oportuna, la continuación de las detenciones y ejecuciones durante el año ha sido difícil de cuantificar».
Arabia Saudí: No reconoce la libertad de religión y prohíbe el ejercicio público de cualquier religión que no sea el Islam. El gobierno somete a los musulmanes que no se adhieren a la interpretación del Islam que hace el gobierno, a la discriminación política, económica, jurídica, social y religiosa.
Sudán: La Constitución provisional y otras leyes y políticas proporcionen cierta libertad religiosa. Sin embargo, la apostasía, la conversión del Islam a otra religión, la blasfemia, y algunos matrimonios interreligiosos están prohibidos. Además, los observadores afirmaron que los salafistas estaban creciendo entre la población musulmana y que este crecimiento fue motivo de conflicto con los cristianos y los musulmanes no salafistas.
Uzbekistán. Obliga a que los grupos religiosos se inscriban en un registro y prohíbe ciertas actividades, como el proselitismo y la edición, importación y distribución de materiales religiosos sin licencia. El gobierno restringió las actividades religiosas que consideraban que estaban en conflicto con la seguridad nacional y, en general, trata con dureza a los musulmanes que practican el Islam, religión mayoritaria, que queda confinada a las mezquitas. La legislación prohíbe a los grupos religiosos la formación de partidos políticos y movimientos sociales, así como la enseñanza privada de los principios religiosos.
Como era de esperar, el Report 2011 presentado por Clinton no hace mención del grave conflicto generado en EEUU por una parte de la reforma sanitaria conocida popularmente como Obamacare. Aunque se ha querido vender como un conflicto entre la visión católica de la sexualidad y una ley sanitaria, el problema de fondo radica en el hecho de que la ley obliga a los empleadores –entre otros, la Iglesia y sus instituciones educativas, asistenciales...– a ofrecer un seguro médico que obligatoriamente debe ofrecer una serie de servicios, algunos de los cuales son incompatibles con la moral católica. Además, la objeción de conciencia está prohibida. Tenemos aquí un conflicto de conciencia de primer orden... (para verlo con más detalle puede leerse el artículo Algunos aspectos polémicos de la reforma sanitaria de Obama, en la Sección “Caso de Moral” en esta misma revista –“linkar” título del artículo–).
Isidor Ramos Rosell
Periodista
1 Informe 2012 sobre Libertad Religiosa en el Mundo, editado por Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), fundación de la Santa Sede, promovida por el Papa Pío XII e iniciada por el P. Werenfried van Straaten en 1947, para ayudar pastoralmente a la Iglesia necesitada o que sufre persecución en cualquier parte del mundo. Su sede central se encuentra en Königstein im Taunus, cerca de FRANFURT. http://www.acn-intl.org En España: http://www.acn-intl.org
Index Mondial de Persécution 2012, las 50 pays où éter Chrétien Coûte le plus, editado por la ong protestante Puertas Ouvertes. http://www.indexmondialdepersecution.fr
Rapport 2011 sur l'intolérance te la Discrimination contra las chrétiens en Europe, ONG ubicada en Austria. Pertenece a la OIDAC, una red europea de organizaciones no gubernamentales, investigadores, intelectuales y expertos que comparten el objetivo de crear conciencia sobre el problema de la intolerancia y la discriminación contra los cristianos en Europa. http://www.intoleranceagainstchristians.eu/
International Religious Freedom Report for 2011, del Departamento de Estado de EEUU http://www.state.gov/j/drl/rls/irf/religiousfreedom/index.htm
